• Universidad Evangélica del Paraguay
  • IBA
martes, mayo 13, 2025
Campus IBA
  • Inicio
  • Página principal IBA
  • Oferta Académica
    • Diplomados
    • Licenciatura en Teología
    • Maestría en Consejería y Liderazgo Pastoral
  • Tienda
Sin resultado
Ver todos los resultados
  • Inicio
  • Página principal IBA
  • Oferta Académica
    • Diplomados
    • Licenciatura en Teología
    • Maestría en Consejería y Liderazgo Pastoral
  • Tienda
Sin resultado
Ver todos los resultados
Campus IBA
Sin resultado
Ver todos los resultados

Da lo mejor de ti, no sabes quién te ve!

Fátima González por Fátima González
2021-09-14
en Vida cristiana
Tiempo de lectura: 4 mins lectura
0
Lapacho rosa de Cecilia Hewstone
WhatsappFacebookTwitterLinkedIn

 

Este cuento fue redactado por Fátima Gónzalez, estudiante de la institución.

Hubo una vez un pasto llamado Kapi í. Estaba muy triste, sentado en un costadito del camino, lloraba amargamente. Kapi í no sabía a quién contarle su inmensa pena, hasta que Tajy, un frondoso lapacho rosado, mientras acomodaba sus amplios brazos hacia el sol, exhibiendo sus maravillosas flores a todo el que pasaba por el lugar, lo escuchó:
Al principio, sólo escuchaba: “snif, snif” y por momentos, los sollozos de Kapi í lo ayudaron a identificar el lugar donde se escondía. Cuando lo vio, le preguntó, qué te pasa Kapi í? ¿Por qué estás llorando tan desconsoladamente?
Kapi í le dijo, me siento tan frustrado, enojado y triste. Desde la última vez que cortaron mi tallo, mis hojas y flores, hace sólo tres meses, hice un gran esfuerzo para sobreponerme, me costó sanar y volver a levantarme. Brotaron nuevas hojitas, creció nuevamente mi tallo y cuando empezaba a dar florecillas tan hermosas, pasaron con un tractor, diciendo que “los yuyos están muy altos, hay que cortarlo ya”, y vinieron con machetes y rastrillos, y nuevamente, me quitaron todo mi esplendor, todo mi esfuerzo de sobreponerme quedó en el fuego, mis hojitas, mis flores, mi tallo, todo fue cortado. No tengo más fuerzas ni ganas para seguir haciendo ningún esfuerzo más para sobrevivir, mucho menos, por ofrecer flores y hojas bellas en el camino.
“Kapi í”, le dijo el dulce, firme y sereno Tajy, mostrando empatía hacia todo lo que su amigo le estaba expresando, “te entiendo…”. ¡No! No lo entiendes!, le dijo ofuscado, Kapi í, a su amigo Tajy. Nadie te persigue con machetes o tractores! Ni barren tus ramas con rastrillos, ni pisotean tus hermosas flores! Tú te paras majestuosamente, levantando tus fuertes brazos al cielo para recibir la luz del sol suficiente para que tus hojas y flores adquieran su brillo. Todos te admiran, te respetan, no te hacen daño, sin embargo, yo siempre pierdo todo, a pesar de dar lo mejor de mí!, entre sollozos le señalaba a Tajy.
Tajy respiró profundo y aunque comprendía lo que realmente quería decir el desesperanzado Kapi í, le dijo: “amigo mío, como soy muy alto, no me puedo proteger escondiéndome o apoyándome en otros árboles, en los días muy calurosos o del frío en invierno, ni tampoco de las tormentas; a veces, me quiero esconder y también me canso, pero es ahí donde más fuerte abro mis brazos al cielo para pedir fuerzas al Creador. Mi tronco es muy deseado para la fabricación de muebles y he sido muy bendecido de no ser atacado aquí, ya que muchos de mis parientes no han sobrevivido. No se han respetado ni a los más viejos, considerados por algunos como reliquia de la naturaleza, otros, sencillamente fueron utilizados como leña, porque se necesitaba más espacio para
cultivar especies económicamente útiles o rentables, y mis flores aparecen muy pocas veces en el año”.
“Sin embargo, siempre te he admirado mucho y me has alentado cuando me sentí triste o desalentado, tomé tu ejemplo y me esforcé cada día. Tú me inspiras a dar lo mejor de mí, eres mi ejemplo cada vez que alguien rompe mis ramas, corta mis hojas, escriben en mi tronco o roban mis flores. Siempre vi tu tesón, tu valentía, tu abnegación, tu capacidad para sobreponerte, los cuales me llenaron de fuerza, esperanza y valor. No te rindas Kapi í, vuelve a levantarte y a florecer. Eres importante, ya que sostienes a la tierra, libre de erosiones, tu función va mucho más allá de lo que a simple vista se puede ver. La copa de un árbol y las flores, ofrecen un beneficio diferente, pero tu presencia la tierra Kapi í, también ofrece beneficios aparte de evitar la erosión del suelo, formas parte de la cadena alimenticia y ayudas a preservar el ecosistema que requiere la diversidad de las especies para su equilibrio. Continúa ofreciendo lo mejor de ti, ya que a pesar de ser constantemente cortado, siempre te levantas y ofreces lo mejor de ti por el bien de otros. Si tú no estuvieras, otros no podríamos aspirar a vivir en tan buenas condiciones, como lo hacemos, gracias a ti”.

©2021 Fátima Gónzalez

Imagen tomada de: https://www.artelista.com/obra/5394753074343941-lapachorosa.html 
Fátima González

Fátima González

Fátima Gónzalez es estudiante del IBA. Actualmente sirve en su iglesia local, CFA Lepretti. Es una lectora compulsiva y una escritora emergente.

Publicaciones similares

Nehemías: Liderazgo para momentos críticos.
Vida cristiana

Nehemías: Liderazgo para momentos críticos.

Débora: Una lideresa con convicción y vocación de servicio.
Vida cristiana

Débora: Una lideresa con convicción y vocación de servicio.

Moisés un líder completo
Vida cristiana

Moisés un líder completo

¿Cómo Fortalecer mi Tiempo de Oración?
Vida cristiana

¿Cómo Fortalecer mi Tiempo de Oración?

¿Qué es la Adoración?
Vida cristiana

¿Qué es la Adoración?

¿Que celebramos en Semana Santa?
Vida cristiana

¿Que celebramos en Semana Santa?

Próximo artículo
La música y la teología

La música y la teología

Deja una respuesta Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y se aplican la política de privacidad y los términos de servicio de Google.

Buscar

Sin resultado
Ver todos los resultados

Temas:

  • Actualidad
  • Anabautismo
  • Biblia y Teología
  • Cultura y cosmovisión
  • Educación
  • Iglesia y ministerio
  • Jóvenes
  • Latinoamérica
  • Navidad
  • Vida cristiana

El IBA se fundó en el 1964 como instituto de capacitación bíblica para pastores y obreros para el creciente pueblo evangélico en latinoamérica. Desde 1994 es incorporado por la Facultad de Teología de la Universidad Evangélica del Paraguay.

Facultad de Teología – Campus IBA, Universidad Evangélica del Paraguay

  • Universidad Evangélica del Paraguay
  • IBA
Facebook Instagram Twitter Youtube Linkedin
Sin resultado
Ver todos los resultados
  • Ingresar
  • Inicio2
  • Inicio
  • Videos
    • IBA Responde
    • Metanoia
    • Conversatorios
  • Lecturas relevantes
  • Podcasts
    • IBA Podcast
    • Fragen rund um die Bibel
    • Biblia y Tereré
    • Cielo y Tierra
  • Tienda
  • Lic. en Teología

Instituto Bíblico Asunción IBA.

¡Bienvenido de nuevo!

Inicie sesión en su cuenta a continuación

¿Contraseña olvidada?

Recupera tu contraseña

Ingrese su nombre de usuario o dirección de correo electrónico para restablecer su contraseña.

Ingresar

Add New Playlist

-
00:00
00:00

Queue

Update Required Flash plugin
-
00:00
00:00