Evangelismo en Cochabamba, Bolivia

Su tiempo de DMI consistía en evangelizar casa por casa; todas las mañanas después del desayuno salían de a dos para compartir del Evangelio casa por casa, trabajando juntamente con la gente de las iglesias locales. Además hicieron evangelismo en las ciudades de Villa Imperial y Quillacollo. Durante la tarde tomaron tiempo para conocer las ciudades, los lugares turísticos y cómo era la vida de la gente.

Sandor Regier, estudiante del segundo año comentó: “Tuve muchas experiencias en todo este viaje, pero donde sé que Dios más estuvo obrando fue en derribar las barreras que me impedían compartir con la gente el Evangelio. Al principio me costaba mucho hacerlo, pero oraba todos los días a Dios para que me utilizara de la mejor manera y así poder compartir con todos de Jesus. Al recordar todo lo que viví en este tiempo, no puedo sino confirmar que fue Dios quien logró quitar esas barreras. Era Él quien estaba en control de todo lo que sucedía porque logré tantas cosas que con mis propias fuerzas no hubiera podido alcanzar. Solo puedo gozarme y sentirme bendecido por todo lo que Dios hizo en mi vida y mi relación con Él.”

Rocío Gómez, estudiante del cuarto año, compartió acerca de cómo IBA le ha preparado para el servicio: “Lo que aprendí en IBA se vio aplicado a la hora de interactuar con gente de otra cultura, de mirar con ojos de amor a cada persona a la que me acercaba a hablar: ya sea que esta hablara en quechua, que me tratara despectivamente, o que estuviera tirada en el piso con olor a calle, bajo los efectos de la droga.”

Angélica Ocampos, del segundo curso de la licenciatura, comentó que la experiencia le hizo valorar lo beneficioso de su formación en el IBA. “Ver la necesidad de las personas y la ignorancia que hay acerca de Dios me ayudó a entender lo necesario que es prepararse para el servicio. Había estado orando al respecto y este viaje me confirmó la importancia de terminar la carrera y otras cosas que tienen que ver con lo que deseo realizar en el futuro.”

Al respecto, Rocío agregó: “Volví al IBA con mayor intensidad a aprovechar todo lo que pueda de este tiempo de preparación, porque afuera nos esperan con corazones heridos y ansiedad por conocer la verdad. Estoy muy agradecida con Dios por estudiar teología y haber tenido la oportunidad de predicar a Cristo, con todas las herramientas que el IBA me proporcionó.”

Damos gracias a Dios por tener estas oportunidades de servicio y aprendizaje. Los viajes evangelísticos en países extranjeros son una oportunidad que frecuentemente se presenta para los estudiantes del Instituto Bíblico Asunción.