Mi experiencia como pastor bivocacional
Fredi Sosa es pastor asistente de la iglesia Presbiteriana El Renuevo y diseñador gráfico. Además, se desempeña como coordinador editorial para la revista La Fuente, una publicación mensual dedicada a la actualización ministerial de pastores, maestros y obreros evangélicos.
Primeramente, estudió Diseño Gráfico y más tarde, Teología. Lo que lo llevó a estudiar Teología fue la vocación pastoral. Había asumido el pastorado principal de su iglesia en 2010 y, aunque hasta ese momento había tenido una buena formación bíblica a través de diversos cursos (como el Compendio de Teología Pastoral de FLET), se dio cuenta de la necesidad de recibir una capacitación bíblico-teológica formal. De modo que, tras orar al respecto junto con su esposa, buscar consejos y comparar opciones, tomó la decisión de inscribirse en el IBA para el 2012.
Fredi resalta que el conocimiento adquirido en aula y biblioteca, junto con las inolvidables experiencias de servicio que el IBA le brindó, han sido y siguen siendo de enorme utilidad en su trabajo en el pastorado, así como en la coordinación editorial de la revista. Cuenta que el IBA le dio herramientas que le ayudan hoy a servir mejor a su congregación, tanto en la preparación de sermones y estudios bíblicos, como en las funciones de liderazgo, guiando y trabajando en equipo. Destaca que la excelencia académica que el IBA le inculcó durante sus años de estudio e investigación, tiene un gran impacto hoy en su trabajo en la revista a la hora de producir y evaluar artículos para ser publicados.
Por otro lado, valora la oportunidad que tuvo durante su tiempo de estudio, de construir relaciones con sus compañeros, que le han bendecido en gran manera a lo largo de los años. Además, relata que la experiencia en las clases y las relaciones con los profesores han marcado profundamente su visión de lo que significa enseñar la Palabra de Dios, y la necesidad siempre vigente de prepararse para hacerlo —una preparación adecuada que involucra no solo el conocimiento intelectual y la destreza técnica, sino el fundamento de una relación viva y permanente con el Maestro.
De esta manera, Fredi ve su trabajo cotidiano como una oportunidad de servicio al Señor. Considera que estar involucrado tanto de una manera bien local (en su iglesia) como de una manera más extendida (en La Fuente) en la tarea de ayudar a la iglesia a cumplir los propósitos del Señor en su lugar de influencia se “retroalimentan” mutuamente.