Egresado sale al exterior para plantar iglesias

Mi nombre es Misael Amarilla. Nací y crecí en la ciudad de San Estanislao, Departamento de San Pedro, Paraguay. Estoy felizmente casado con Dyrly Armoa, y tenemos dos hermosos hijos: Noah Samara (5 años), y Dan Ezequiel (2 años). Tuve el privilegio de ser egresado del IBA obteniendo así la Lic. en Teología. Además, hice un diplomado en Capellanía Empresarial. Más adelante, tuve la oportunidad de realizar una Maestría en Divinidades (MDiv) en la Universidad de Fresno Pacific, Biblical Seminary. Amo a Jesús y amo a su iglesia y quiero que las personas puedan tener la oportunidad de tener un encuentro personal con Jesús. Esto me apasiona y hace que pueda perseverar en cada desafío que se me presenta.

Fui al IBA porque sentía que Dios me estaba llamando para dedicar mi vida entera a su servicio. El IBA me ayudó a crecer en conocimiento gracias a sus docentes de altísimo nivel y gracias a los trabajos fuera de clase como las lecturas y las monografías. Además, el IBA me ayudo a priorizar siempre mi vida espiritual a través de los encuentros espirituales en los internados y la lectura de la biblia como devocional. La combinación equilibrada entre conocimiento y espiritualidad es esencial para el servicio al que fui llamado.

Siempre me gusto la clase de hermenéutica con la profesora Elfriede de Verón, por su sencillez, claridad, y un estilo practico para interpretar el texto bíblico. También recuerdo y valoro la clase de homilética con el profesor Flavio Florentin. Él nos enseño a elaborar un sermón con sentido y propósito, conforme a la necesidad de la iglesia utilizando un concepto simple como la proposición en base a una idea central. Durante mis estudios en el IBA, hice mi practica supervisada en Luque en una obra nueva de la iglesia Concordia. Luego del IBA, fui capellán de la Capellanía Empresarial por varios años, primero en el Departamento de Canindeyu, y más tarde en el Dep. Central. Además, fui capellán en los primeros años del colegio Johannes Gutenberg en Santani dando inicios a los trabajos de plantación de la Iglesia en el lugar. Por otra parte, mi esposa y yo fuimos líderes de jóvenes en la iglesia Maranata de la ciudad de Asuncion.

Durante mis estudios en los Estados Unidos, junto con mi esposa servimos en una iglesia que tenia un ministerio para latinos. Colaboramos con la traducción de materiales, como intérpretes, discípulado, capacitaciones para matrimonios y líderes, grupos de estudios bíblicos, consejería, entre otras cosas.

Hoy estamos con un nuevo desafío. Como familia planeamos mudarnos a Málaga, España para establecer una iglesia Hermanos Menonitas. El desafío es grande pero nos motiva la necesidad espiritual que hay en España. El cristianismo evangélico en España ronda por el 2% y existe una necesidad de más obreros para llevar las buenas nuevas de Salvación. Además, no existe una sola iglesia de los Hermanos Menonitas en España.